Los 10 museos más originales de España
Reza en la placa de uno de los museos que la curiosidad del hombre es infinita ¿Hasta dónde quieres llegar? Te proponemos un recorrido por diez de los museos más curiosos de España. ¿Nos acompañas?
(Microminiaturas: Calle Iglesia, 5. Microgigantes: Calle del Sol, 2. El Castell de Guadalest. Alicante).
¿Has visto alguna vez las obras de un museo a través de una lupa potente? Pues esta es la experiencia que podrás vivir en el Museo de las Microminiaturas en Guadalest, el pueblo alicantino con más museos por habitante. La colección incluye obras tan originales como el Guernica de Picasso pintado en una semilla, la Estatua de la Libertad dentro del ojo de una aguja o un camello paseando por el ojo de una aguja. Pero si a ti lo que te gustan son las miniaturas vistas a través de microscopios o lupas de aumento o las esculturas gigantes, no te pierdas el Museo Microgigante.
(Calle Cantarranas. Santa Cruz de la Salceda. Burgos)
Considerado el único museo dedicado al olfato en España, este centro cuenta con la colaboración de investigadores españoles, que documentan curiosidades sobre el sentido olfativo. Además podrás disfrutar de los efluvios agradables del café, los cítricos y el vino, así como de esencias de aromaterapia y de aromas del recuerdo u olores que sanan o que enferman. ¿Quieres poner a prueba tu olfato?
(Carretera de Ganuza 1. Metauten. Navarra)
Todo un universo alrededor del diamante negro de la gastronomía: la trufa. En este centro podrás descubrir las mejores combinaciones culinarias que se pueden realizar con este hongo comestible tan apreciado en la alta gastronomía. Además podrás convertirte en un cazador de trufas por un día y conocer el entorno y la cultura de este singular hongo.
(Plaza de Herrasti s/n. Ciudad Rodrigo. Salamanca)
Las posaderas de nobles, caballeros, doncellas, monjes o princesas tuvieron que reposar en algún momento en los bellos utensilios que se recogen en este museo de Ciudad Rodrigo. Una colección formada por unos 1300 orinales procedentes de 27 países de todos los tiempos desde el siglo XIII al XX. Una muestra compuesta por distintas formas y tamaños, diferentes materiales (incluso oro, plata o platino) y diversas ornamentaciones. ¿Te apetece conocer la historia del orinal?
(Calle Comerç, 36. Barcelona)
Impulsado por el Gremio Provincial de Pastelería de Barcelona, este delicioso museo nos adentra en el mundo del chocolate desde sus orígenes y su llegada a Europa pasando por las propiedades nutricionales del cacao y curiosidades. No te pierdas los talleres y las actividades para familias. ¡Son muy dulces!
(Calle Armiñán, 65. Ronda. Málaga)
¿Qué era un bandolero? ¿Un contrabandista, un ladrón o un salteador de caminos? El museo ofrece distintas miradas de esta figura tan legendaria. Además podrás degustar productos típicos de la Serranía con un exquisito pan de la zona acompañado de una copa de vino denominación Sierras de Málaga en la actividad Cata Bandolera.
(Calle Del Arenal, 8. Madrid)
¿Sabías que existe un museo dedicado a la tierna figura del Ratoncito Pérez? Allí se explica el origen de la leyenda de este mítico personaje que nos dejaba por la noche una moneda debajo de la almohada a cambio de nuestro diente recién caído. Un museo curioso dedicado al cuidado dental. ¡Una visita muy recomendada para los niños que se resisten a lavarse los dientes!
(Calle de la Ciutat, 7. Barcelona)
Dicen que el invento es algo que sirve para resolver un problema, y en este museo no faltan ideas. Tampoco creatividad, innovación o emprendimiento. Dividido en tres espacios (Sociedad Ilimitada, Reflexionarium y Espacio Absurdo) encontrarás todo tipo de artefactos desde los más útiles a los más absurdos e incluso talleres para poner a prueba tu imaginación ¿Por qué no se me habrá ocurrido a mi antes? te preguntarás cuando salgas del museo.
(Calle Sequia, 1. Girona)
Desde las sombras chinescas, pasando por la linterna mágica o los hermanos Lumière hasta llegar a nuestros días, el museo ofrece un recorrido por la historia del cine. También recoge una amplia colección de cámaras y proyectores de pequeño formato, fotografías y otros aparatos que hicieron del cine un mundo mágico.
(Calle Covadonga, s/n. Infiesto. Piloña. Asturias)
Si quieres darte un paseo por la Casa del Tiempo podrás ver maquinarias de más de 300 kilos y relojes que datan de 1700. La colección está formada por más de 500 piezas: desde relojes de torre a industriales, de estación o de bolsillo. Un curioso recorrido por la historia de esta peculiar máquina del tiempo.