10 consejos para motivar a tu equipo
Ya nadie lo duda, un equipo motivado hace posibles los retos y objetivos más difíciles. Por el contrario, cuando se respira el desánimo, las metas parecen inalcanzables. Estos consejos te pueden ayudar a crear unas condiciones de trabajo idóneas.
- La persona indicada…
… para el puesto indicado. Pregúntate si cada persona de tu equipo ocupa el puesto adecuado, si se siente a gusto, si le permite desarrollar y potenciar sus habilidades. Muchas veces, el desánimo viene porque los puestos de trabajo o las tareas no están correctamente designados.
- Desarrollo de carrera
La actitud es importante, pero igual de importante es estar preparados para llevar a cabo nuestro trabajo. Si conoces a cada persona de tu equipo, sabrás ofrecerles las herramientas para que amplíen sus capacidades o mantengan actualizados sus conocimientos.
- ¿Sabes delegar?
Autonomía, iniciativa y creatividad muchas veces van de la mano. Delegar tareas y funciones, además de generar autonomía y potenciar otras habilidades personales para crecer en el trabajo, refuerza la confianza del equipo. Asegúrate no solo de delegar tú, sino de potenciar esta característica dentro de tu equipo.
- Liderazgo participativo
Saber escuchar las opiniones de tu equipo e involucrarlo en las decisiones mejorará los resultados y generará lazos de confianza. Intenta poner en práctica las ideas que surjan y potenciar el flujo de comunicación en todas las direcciones.
- Ambiente agradable
A veces caemos en el error de no involucrarnos en los conflictos que puedan surgir en el seno de nuestro equipo de trabajo. Un líder sabe escuchar y actuar para crear un buen clima laboral y, cuando ese equilibrio se rompe, se involucra para intentar resolverlo.
- Sé flexible
La flexibilidad es una de las cosas más preciadas por los empleados. Si conoces a cada persona de tu equipo, sabrás de sus necesidades y podrás ser creativo a la hora de ofrecerles aquello que más desean, como un día de teletrabajo, una jornada reducida, etc.
- Objetivos conjuntos
No hay mejor forma de incentivar el cumplimiento de los objetivos que negociarlos con tu equipo. Involucra a cada persona en sus objetivos personales, fijadlos en conjunto y notarás cómo crece su compromiso. Lo mismo sucede con los objetivos de equipo.
- Premia un buen resultado
Es fundamental premiar el trabajo bien hecho. Cuando se cumplen los objetivos tienes que felicitar a tu equipo y pensar en formas de reconocer su trabajo, como un día de vacaciones extra, un incentivo económico o un regalo.
- Una retribución competitiva
El salario es importante. Más que como un elemento motivador, para evitar el desánimo. Una persona que siente que su trabajo no está bien valorado o no tiene un salario acorde con su puesto, actividad, empresa o sector, es muy difícil que trabaje motivado.
- Espacios colaborativos
A veces no le prestamos al espacio que nos rodea la importancia que se merece. Trabajar en un entorno agradable, con ciertas comodidades y elementos básicos, como un buen mobiliario, ordenadores, iluminación y temperatura, influye mucho en el ánimo colectivo. Los espacios también deben favorecer el trabajo colaborativo, con una distribución que favorezca la interacción y elementos como pizarra, pantalla, etc.