Claves para que tu equipo se sienta valorado
El refuerzo positivo, un sistema de incentivos justo, delegar responsabilidades, la comunicación abierta… son algunas de las recomendaciones para que la gestión personal se traduzca en un equipo comprometido y motivado.
Estos consejos son básicos, aunque no los únicos, para gestionar tu equipo de forma que se sienta valorado y dé lo mejor de sí.
- Estrategia y filosofía de empresa
La primera pregunta debería ser: ¿conocen todos los empleados la estrategia de la compañía? Es absolutamente necesario que, independientemente de sus puestos o su antigüedad, cada persona reciba comunicación constante sobre hacia dónde va la empresa y cuáles son los valores y la cultura corporativa. Es la única forma de que se sientan identificados, empaticen y se sientan parte de esos objetivos compartidos. A la vez, siempre hay que destacar y explicar cómo los objetivos como grupo contribuyen y suman a la estrategia global.
- Comunicación abierta y constante
Cuanto más directa, cercana y constante sea la comunicación con las personas de tu equipo, estos se sentirán más involucrados y escuchados. Deben conocer los pormenores de los proyectos y actividades de la empresa, sentirse invitados a aportar sus ideas y aclarar cualquier tipo de interrogantes (esto último evitará los rumores). Las nuevas tecnologías nos ayudan en este sentido, pero nunca deben reemplazar al contacto personal.
- Gestión personal
Cada uno de los integrantes de tu equipo debe sentir que su papel en el equipo es importante. En este sentido es fundamental que cada persona ocupe el puesto adecuado a sus capacidades. Solo de esta forma podrá potenciar sus puntos fuertes y contribuir a los resultados. Fija conjuntamente los objetivos con cada uno de ellos, y que estos sean realistas y alcanzables, pues así se refuerza el compromiso adquirido.
- Ambiente agradable
Crea un ambiente agradable de trabajo, tanto física como psicológicamente. Un ambiente cómodo, que se pueda personalizar por ejemplo con fotos o plantas, es igual de importante que crear un ambiente de cordialidad y confianza dentro del equipo. Todo ello hará que se involucren más y se sientan con mayor libertad a la hora de desarrollar su potencial y creatividad.
- Responsabilidades
Tener la capacidad y el respaldo que necesitan para desarrollar su trabajo, otorgar facultad de decisión, asumir nuevas tareas con más responsabilidades… Todo ello reforzará la confianza y la motivación de cada uno. De esta forma, logramos que se sientan más involucrados a nivel individual y como grupo de trabajo.
- Sistema de motivación e incentivos
Un buen sistema de motivación e incentivos que sea justo y cumpla con las expectativas del grupo es un ingrediente básico para que se sientan valorados. En este sentido, aunque los recursos monetarios son siempre un buen incentivo, es importante institucionalizar el refuerzo positivo, valorar el trabajo realizado con una “palmadita en el hombro”, reconocer el esfuerzo realizado por el grupo… Y si de vez en cuando lo hace alguien jerárquicamente importante, mucho mejor.
- Trabajo en equipo
Recordar que hay que trabajar en equipo puede parecer una redundancia, pero no lo es en absoluto. Sé un líder y un coordinador de equipo que, lejos de fomentar la competencia individual, destaque cómo se complementan los esfuerzos individuales y cómo se logran los resultados sinérgicos. De esta forma, contribuirás notablemente a aumentar el sentido de pertenencia, el de contribución de valor y el sentimiento del equipo de sentirse valorado como grupo.